El tiempo que tardemos en reconocer los síntomas de un ictus isquémico es crucial para poder recuperarse plenamente sin secuelas importantes.
Se ha demostrado que los anticoagulantes suministrados durante las tres horas posteriores al ictus, disminuyen los coágulos que se producen. Después de ese periodo de tiempo ya no se pueden suministrar, por ello es de vital importancia darnos cuenta pronto de los síntomas.
Se aplica una sencilla y rápida prueba a realizar de seguido en 1 minuto.
- Comprobar si puede sonreír
- Levantar ambos brazos y poder mantenerlos erguidos.
- Pronunciar coherentemente una frase sencilla.
También son síntomas de ictus el entumecimiento o caída de una parte del rostro.
Debido a que durante el accidente cerebral, el cerebro está privado de oxígeno, cuanto antes se reciba tratamiento, más posibilidades tendrá el paciente de recuperarse plenamente.
Deberíamos conocer todos estos tres gestos a realizar, así, si algún familiar se vuelve de repente incomprensible, llamaremos sin dilación al teléfono de urgencias.